Fotografia

Rubén Ochoa nos presenta en el Teatro Británico Mexicano la exposición titulada Bestiario, es una obra en la cual nos habla de los nuevos pecados capitales o al menos eso es lo que nos quiere dar a entender, los diferentes significados que nos puede transmitir.

Sin duda las imágenes me cautivaron y debo decir que me confundieron en cierto modo, es difícil tratar de interpretarlas, todos percibimos las cosas de un modo diferente, pero al fin y al cabo todo nos llevaba a los pecados capitales, algunas fotografías son fáciles de entender y otras son un poco más complejas, solo es cuestión de esforzarse un poco más en el "observar" y analizar a fondo nuestras "percepciones".

El lugar como que de repente me teletransportó a una parte de Europa de tiempos antiguos como la edad media o algún lugar histórico, la iglesia en decadencia es maravillosa, otra de las cosas que más me gustó fue la forma en que tiene plasmada las fotografías en piedra, le da un toque diferente, rompe con lo común, es raro ver una exposición asi como la muestra Rubén Ochoa y eso me encantó, es sin duda otra manera de expresar sus intenciones, su trabajo, sus inquietudes, sus percepciones, su arte.

En comparación con David La Chapelle, son muy parecidos los dos fotógrafos, ambos manejan temas controversiales y difíciles de interpretar aunque La Chapelle lo que tiene es que sus exposiciones son más proyectadas, esa forma de trabajar de los "Gringos" tan peculiar pero eso no quiere decir que Rubén Ochoa no sea bueno, al contrario podemos darnos cuenta que Ochoa trabaja con menos presupuesto y su trabajo es tan espectacular como cualquier otro, además es mexicano orgullosamente, quizás lo que le falta un poco es que no es tan nombrado como La Chapelle, pero sin duda su trabajo es de muy buena calidad y sinceramente me puso a pensar en más de una vez, excelente exposición...!!!